Tener metales pesados en nuestro cuerpo como el mercurio, el cadmio, el plomo, el uranio y el aluminio es más frecuente de lo que imaginas, pues estos pueden entrar al cuerpo humano a través de los alimentos, el agua, el aire o por absorción a través de la piel. Si tienes rellenos dentales, has sido vacunado, has comido pescado o mariscos, de piscicultura y no de captura libre (wild catch), entonces tienes una gran probabilidad de que tu cuerpo esté contaminado. Hay estudios recientes que señalan que comer fresas orgánicas diariamente, ayuda a este proceso ya que atraen estos metales en el cuerpo y ayudan a desecharlos.
Para limpiar nuestros cuerpos de todos estos metales -a nivel celular- tienes varias opciones, entre ellas comer alimentos que limpian (frutas y verduras orgánicas), beber jugos de vegetales, tomar suplementos naturales (como el alga chlorella), por la sudoración (a través de los ejercicio, el yoga bikram o el sauna), y mediante técnicas de respiración.
Un jugo al día
Una de las mejores maneras para desintoxicarse es a través de un jugo o “smoothie” verde cada mañana, que proporciona las vitaminas, minerales y antioxidantes que el cuerpo necesita.
A continuación te presentamos un jugo que está lleno de alimentos desintoxicantes que fortalecen el hígado, recogen los metales pesados en el cuerpo y ayudan a eliminarlos.
Ingredientes:
2 betabel pequeñas o 1 grande (remolacha, betarraga)
1 1/2 tazas de Kale (berza)
1 tazas de apio picado
1 pepino mediano
1/2 taza de fresas orgánicas
El jugo de 1/2 limón
1/2 manojo de hojas de perejil
1/2 manojo de hojas de cilantro
El Jugo de un pedazo de jengibre de 1 cm. de largo (aproximadamente)
1-2 cucharaditas de semillas de chía
Instrucciones:
- Lava todos los ingredientes. Elije todo orgánico si es posible.
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Coloca todos los ingredientes (menos las semillas de chía) en la licuadora si no tienes un extractor de jugos. Si está usando una licuadora agrega una taza de agua – y si el jugo es extremadamente denso-, puedes utilizar un colador para quitar las partículas más grandes (opcional).
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Agrega las semillas de chía al jugo ya preparado y deja en remojo aproximadamente 10 minutos. Las semillas de chía contienen fibra soluble en agua, que les da una consistencia similar a un gel, una vez que estas se empapan en un líquido. Este gel absorbe las toxinas en tu tracto digestivo, ayudando a tu cuerpo a limpiarse a sí mismo.
Te recomiendo rallar el jengibre y pasarlo por un filtro de tela, una media nailon o manta de cielo; obtén el jugo exprimiéndolo y luego lo añades a tu preparación.
¡Disfruta tu jugo y coméntanos si te gustó la receta!